No tuvimos infancias similares, no tenemos amigos en común, ni en fb.
No hay forma de relacionarnos más allá de lo que vivimos...
Sin embargo te ven de casualidad las pocas amigas que conociste, te encuentro por la calle, te veo desde el colectivo.
Odio seguir mi vida y que te empecines en aparecer sólo para joderme, para cagarme el día.
Para que me de cuenta de que me seguís moviendo el piso, que no te olvidé aunque así lo creía y afirmaba.
Te odio. Te odio. Te odio.
Y odio profundamente volver a hablar de vos.